Leyendo algunos apuntes sobre nuestra identidad y lo que somos y lo que creemos que somos, me encuentro con el Psicólogo Timothy Wilson, quien ha escrito un libro titulado “Stranger to ourselves” (Extraño a nosotros mismos)….no podía menos que seguir el hilo de la lectura, pero antes de seguir, algo de música….(Massenet - Itzhak Perlman, mi preferido)
Probablemente estemos errados acerca de nosotros mismos
Que título demoledor. Me detuve a pensar en “cuanto de razón” tenía ese pensamiento. Y, por supuesto, comencé a buscar en mi interior, cuantas veces estaba satisfecho por mi forma de ser, y cuantas no….Cuantas veces, mis familiares y amigos, me decían “no te reconozco”, cuantas veces pensé que los comentarios en contra de mi comportamiento, solo albergaban envidia, recelo, o enojo.
Avanzando en el texto de la nota, me encuentro con un estudio de muchos años que revela que la relación entre nuestra opinión de nosotros mismos y lo que piensan los demás, de nosotros mismos, es de 0,4.
0,4 es un índice bastante pobre de correlación entre variables (en estadística). ¿Entonces quiere decir que lo que yo pienso que soy es apenas un 0,4 de la realidad de lo que piensan los demás?
¿Quién mejor que yo puede conocer como soy?
A esta altura de los acontecimientos, se me habían disparado las alarmas….natural, comenzaron a trabajar los mecanismos conscientes e inconscientes que participan en el desarrollo de toda actividad humana.
La primera, consciente, es la mente más racional, la que piensa deliberada y voluntariamente, y se compone de lo que conoces de ti mismo.
La mente inconsciente está formada por los procesos mentales de los que no eres consciente. Responde con rapidez, de manera automática, toma decisiones instantáneas y presta especial atención a lo que considera una amenaza. Suele basarse en categorías y estereotipos, es rígida, aprende con rapidez de la experiencia, pero le cuesta mucho cambiar lo aprendido. Y lo que es peor aún, una parte muy importante de lo que eres tiene lugar a nivel inconsciente, de manera que las personas no tenemos acceso a muchos datos sobre nosotros mismos.
¿Entonces, qué podemos hacer?
Hay veces que hay discrepancias entre el consciente e inconsciente, por ejemplo cuando conscientemente tenemos que ir a esa reunión de familia y el inconsciente te dice que prefieres quedarte apoltronado en el sofá sin hacer nada.
La rigidez de la personalidad es un factor que va en contra del reconocimiento de lo que sentimos. Las personas más flexibles, que aceptan mejor sus propias discrepancias y no tienen miedo a cambiar, estarán más dispuestas a reconocer cuando han sentido algo que no encaja del todo con sus teorías acerca de sí mismas, y también estarán más dispuestas a cambiar sus teorías o su conducta.
Las personas más felices son aquellas en las que consciente e incosciente están dirigidos en la misma dirección, o muy similares.
En ámbitos profesionales siempre recomendamos el feedback (realimentación o devolución de opiniones), tanto de clientes, como subordinados, como de superiores, etc. A esto lo llamamos feedback 360º. Una forma de comprobar si lo que uno quiere transmitir, es exactamente lo que han recibido y decodificado los demás interesados.
Por ello, te recomendamos que escojas a las personas que creas adecuadas, personas en las que confías, y les pidas opinión acerca de cómo creen que eres. Puede ser tu pareja, tu padre, madre, hijo, amigo, jefe, en fin, algunas personas que te dirán cosas que tú no estás viendo. Actualmente, el Coaching es una buena técnica para lograr ver algo que no podemos ver, por que nuestras mentes funcionan con jerarquías, modelos mentales organizados, incorporados a través de nuestras experiencias y que funcionan como filtro de la realidad, y si no cambiamos esos filtros siempre creeremos que somos como creemos que somos.
La nota termina con tres recomendaciones para saber lo que hay en tu inconsciente:
“1. Ten en cuenta lo que la gente piensa de ti, pues pueden estar viendo cosas que tú no ves.
2. Observa tu propia conducta y haz inferencias que tengan en cuenta no solo tu estado interno, sino también las circunstancias y el ambiente que te rodea. Cuando la presión del ambiente o de los demás es sutil, la gente puede no darse cuenta.
3. Revisa tus teorías. Observando la propia conducta, las personas pueden revisar las teorías que tienen acerca de sí mismas, pues a veces esas teorías están equivocadas. Pueden haberse formado hace muchos años, cuando eras una persona diferente. Es decir, a veces una persona no se da cuenta de que ha cambiado.”
No puede resistir la tentación de reflexionar acerca de lo que había leído, aumenté algo el volumen de la música, me serví una copa de Coloma Torre Bermeja 2007 - Bodegas Coloma, y con el primer sorbo, (será por su aroma complejo y elegante de fruta madura, notas tostadas y pasas de uva y la vainilla), comencé a dejar volar mi imaginación sobre determinadas situaciones, para que mi inconsciente se libere y se muestre tal cual era….fueron minutos intensos, reveladores. Ahora resta pedir a mi gente de confianza cual es su opinión acerca de cómo soy….y ser suficientemente sincero para saber si estoy muy lejos de lo que yo pienso de mi mismo.
Y Uds., ¿creen que lo que piensan los demás de vosotros es similar a lo que Uds. piensan de sí mismos? Estad abiertos a las críticas….por que si no coincide, puede ser una puerta al aprendizaje, al crecimiento, entonces serán los mejores minutos jamás dedicados a algo.
Los dejo con un pensamiento de Napoleón:
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